jueves, 9 de julio de 2009

Jueves

"porque el que trabaja merece su sustento"

Desde que está Sara con nosotros, conmigo, siento que las cosas más inexplicables ya no tienen porqué tener un porqué... digamos que como Pablo, me he caido del caballo. Mi interior se debate muchas veces entre los porqués y las dudas, y la necesidad de tener Fe ciega... es una lucha que ya dura años, y años, y que últimamente había decidido volver la vista y no tormentarme más. Hasta que llega un milagro a tu vida y empiezas a aceptar que no todo tiene un porqué, que el amor más que darlo, hay que regalarlo, y que Dios, al igual que cualquier padre, regala amor y no exige más; pero no dejo de pensar que cada día que pasa, cada persona con la que me encuentro, cada experiencia que leo, son señales que sigo recibiendo por lo que Esa Antena sigue emitiendo y mi antenita sigue queriendo estar receptiva.
Quiero trabajar cada día y recibir el sustento que tenga que merecer, sería muy triste no querer trabajar y esperar algo a cambio.

2 comentarios:

Luis y Mª Jesús dijo...

Y solo acaba de empezar. Prepárate Ceci. Si mis amigas de la primera juventud me vieran no me reconocerían, físicamente he cambiado pero sobre todo aquella escéptica que de tan realista no solo tenía los pies en el suelo sino hasta los tobillos clavados en tierra, aquélla ahora vive un milagro o varios cada día que la ayudan a superar el miedo, el pánico, respirando hondo y pensando: “qué mas da si la vida es un milagro”.
Enhorabuena Ceci, Sara es una preciosidad.
Un abrazo

caballerotrueno dijo...

Lo primero he de decir que me gusta hacer camino contigo. Uno anda y el bosque se va despejando (¿o es la vista la que se clarifica?).

Y segundo... ¡¡¡Diossss!!! ¡¡Un comentario de los Roa!!!! Estoy emocionado... Mª Jesús... Como me gusta leerlos... Me ayudan a caminar y a relativizar.

besos