miércoles, 30 de septiembre de 2009

Y la vida sigue...


Hoy he tenido en mis brazos a la hija de una compañera que nació ayer después de un largo parto y mediante cesárea; las dos luchando para sacar adelante lo que ya comenzó hace más de nueve meses, y sorprendentemente se me había olvidado lo frágiles que nacemos, tan pequeñitos, tan inocentes pero tan llenos de amor. Después de cuatro meses se me había olvidado cómo acunar a un recién nacido, como tomarle en brazos para que su cabecita no sufra, oler su piel a nuevo, a ilusión y a vida. Todo el mundo, por lo menos y durante un minuto, debería sentir esa sensación de vitalidad y novedad en la suya, tener a un bebé entre sus brazos, creo que así acabaríamos con muchas cosas feas en el mundo...

¿Alguien se podría resistir a esta mirada?

domingo, 13 de septiembre de 2009

Siempre


Intentaré quereros siempre, con los ojos muy abiertos.

martes, 8 de septiembre de 2009

... dormir


Dormir, que bonita palabra!!

Este fin de semana lo he pasado en el pueblo con mis padres, y como siempre, la compañía de mi madre (como un tesoro) dándome una clase magistral de paciencia, ternura y comprensión.

Estoy cansada y hoy tengo que reconocer que al igual que quiero a mi hija con locura, también hay momentos que me digo a mi misma, "en menudo berenjenal te has ido a meter"... hoy es uno de ellos. Estoy agotada porque blindo mis nervios ante los suyos, padezco y me entristece cuándo no puede dormirse (casi siempre) y estoy desarrollando lo que en otro blog he leído hoy, la paciencia, pero a kilos por día.
Sé que a todos los papás del mundo les pasa lo mismo y no puedo evitar ponerme en la piel de mis padres cada vez que algo difícil se me pone en mi camino, y lo veo como otro pequeño escalón que subir... y es que cuándo observo a Sara me doy cuenta de que hay que enseñarles hasta cómo calmarse y cómo dormirse y eso es lo más básico para afrontar el mundo que les va a tocar vivir.
De momento hoy me está dejando este ratito para escribir, que no es poco, y mañana, ... bueno, para mi mañana es dentro de una hora y media cuándo vuelva a darle de comer.