sábado, 19 de diciembre de 2009

Salud

Estos días al lado de Sara en el hospital, porque ha estado malita, te hace darte cuenta (aunque es algo que sé que mucha gente lo sufre, nunca en mi caso he reflexionado más del tiempo necesario) de todas las personas enfermas y todas aquellas que, sobretodo, no están en sus hogares durante estas fechas. La soledad de la enfermedad. La incertidumbre de la mejoría. La sensación de vacío.
Mi vida es muy frágil, pero la de un niño lo es más;  había muchos niños ingresados, muchos niños graves, pero todos ellos estaban acompañados por sus papás y mamás. ¿Y los niños que no lo están?. Se me revuelve el estómago.
No sé las veces que le dí vueltas a la idea de mi vida sin un ser querido, incluida mi hija, y no debería atormentarme de esa forma... pero ¿podría ocurrir? ¿verdad? y eso me hace darme cuenta de que no estoy preparada para pensar en la muerte como una oportunidad de Vida más allá de la vida. Soy egoista, soy cobarde, tengo miedo... pero mi familia, mis amigos, mi gente, dónde mejor está es a mi lado y yo al lado de ellos.



4 comentarios:

Edurne Beltrán dijo...

Deja de tener esos pensamientos, la vida es mucho más bonita.
Espero que tu hija esté recuperada y que paséis unas bonitas navidades.
Un besito.

Santi dijo...

Bueno, yo también lo pienso alguna vez y es complicado saber cómo viviríamos. Somos más débiles y más fuertes de lo que pensamos a veces. Los hijos son especiales. Es un dolor indescriptible sólo imaginarlo. No es comparable a otro. Yo te entiendo. Y entiendo que lo pienses. Es más, creo que hay que pensarlo de vez en cuando. La muerte está ahí. Y creo que es razón suficiente para disfrutar a tope del regalo de la Vida.

Besos

Paula dijo...

¡Espero que esté recuperada! En cuanto pueda te llamo... Creo que para ver a un niño gravemente enfermo nunca estamos preparados, pero las madres sacan fuerzas de si infinito amor... Yo tengo un testimonio en Munich estremecedor... Su último correo me hizo llorar, y como dice ella, "a veces, no quiero pensar en sufrir más" El amor todo lo puede. Besitos

Luis y Mª Jesús dijo...

Me alegro mucho de que Sara ya esté bien. La muerte está ahí Ceci, pero no te atormentes y da gracias por la vida.
Besos